BUENOS, MALOS Y PEORES

Es el momento de hacer limpieza, es el momento de empezar a discriminar y empezar a fijarnos en lo que nos conviene o no.

La anterior sentencia propia de un renegado de la vida no está motivada por un desengaño personal o por un cabreo sordo sin sentido, tiene que ver con un cambio de conciencia general, que ha afectado antes a los culpables de esta maldita crísis que a los que en realidad la están sufriendo que son los curritos y la ciudadanía.

Hace unos diás una persona que conozco tuvo un extraño malentendido con una compañía de telefonía móvil, tras completar una portabilidad no le habían enviado las dos últimas facturas, facturas que pretendían cobrarle sin detallarle por que servicios y llamadas tenía que pagar.

Vale, todos nos podemos equivocar, puede ser un error administrativo, son muchos usuarios, son muchos casos particulares bla,bla, bla...

Pero a lo que voy es al trato que esta persona recibió a raiz de este malentendido y paso a resumirlo:

El cliente recibe varias llamadas de operadores de la compañía que le tratan con muy poco respeto y le dicen que si quiere las facturas que se acerque a un distribuidor de la marca que allí se las darán tratádole como a un moroso, de una de las llamadas fuí testigo y la verdad es que es lamentable que las empresas obliguen a los empleados a tratar así a la gente que les está dando de comer.

La operadora pasa el expediente a un despacho de abogados, que tratan al cliente con respeto y educación, el cliente recibe una carta y el mismo día abona la deuda, entendiendo que si existiera algún error en las facturas al haber pasado por un servicio jurídico podría reclamar.

A lo que voy:

Las empresas han empezado el "sálvese quien pueda" y les importa poco perder la cara o el poco respeto que se habían ganado, lo que no entienden es que cuando acabe esta situación de recesión tendrán que volver a conseguir a los clientes a los que han espantado, así que como decía lineas arriba es el momento de empezar a recopilar datos de amigos y saber que empresas no merecen que depositemos nuestra confianza en ellos.

A fecha de hoy, el cliente todavía no ha recibido el detalle de servicios y llamadas por el que HA PAGADO, hablamos de una cantidad de dinero razonable pero que si hubiera sido suficiente en mi caso para visitar una oficina de consumo...